DESCUBRE
LOS BENEFICIOS DE LOS VEGETALES DE PRIMAVERA
La primavera es una época del año perfecta para comenzar de nuevo, para desintoxicarnos y poner en forma nuestro cuerpo después de la temporada de fiestas y de cara al verano, ¿y qué mejor forma de hacerlo que incluyendo los vegetales de temporada en nuestra dieta? Bajos en calorías, contienen mucha fibra y están llenos de nutrientes.
Las
verduras de temporada son picantes, astringentes y en ocasiones, amargas.
Curiosamente todo esto nos ayuda a limpiar los sistemas del hígado y la
vesícula biliar. También ayudan a limpiar el organismo y aceleran el sistema
digestivo, introduce en tu dieta las siguientes verduras de temporada y deja
que tu cuerpo se adapte. Recuerda que debes beber mucha agua también y masticar
todo muy bien.
Ensalada
de hojas verdes
La
lechuga se compone de 92 a 95% de agua, pero contiene vitaminas y el poco común
silicio mineral, que ayuda a renovar las articulaciones, los huesos y los
tejidos conectivos. Las más verdes y oscuras son las más nutritvas.
¿Has
probado el "mezclum" es un término francés que denomina una mezcla de
ensaladas variadas de varios brotes verdes de espinaca, hojas de mostaza,
rúcula, escarola, diente de león,
achicoria
y otras verduras de hoja. Estos paquetes mixtos hacen que sea mucho más fácil
cosechar los beneficios de diferentes tipos de ensaladas.
Diente
de león
El
humilde diente de león, un miembro de la familia del girasol, es 100%
comestible. Esta "mala hierba" está infravalorada, ya que es rica en
nutrientes, vitaminas y minerales, además de muy beneficiosa para el sistema
inmunológico. Las hojas de diente de león también favorecen el buen
funcionamiento hepático y renal. Además es diurético y ligeramente laxante.
Se
utiliza crudo en ensaladas mixtas, batidos o sándwiches, y combina muy bien con
queso, aguacate o aceite de oliva.
Lúcula
Cuando
es joven, está en su punto más dulce. Es alta en azufre, un mineral activo de
cara al "embellecimiento", que limpia el hígado y la piel, así que
nos pone más guapas. Es también una gran fuente de fibra, antioxidantes,
vitaminas del complejo B, zinc, cobre, vitaminas A, C y K, calcio, hierro,
magnesio, fósforo, potasio y manganeso. ¡En la antigüedad también se creía que
poseía propiedades afrodisíacas!
Berro
Esta
planta de hoja verde se encuentra normalmente junto a arroyos y estanques, y es
una de las verduras más conocidas desde la antigüedad para usar en las comidas.
¿Sabías que en la década de 1800 se vendía como desayuno a los trabajadores
industriales británicos? Era famoso por tratar todo tipo de dolencias.
El
berro tiene un perfil nutricional potente que incluye vitamina K, calcio,
beta-caroteno, hierro y magnesio. Curiosamente, es también una buena fuente de
origen vegetal de yodo, que ayuda a regular el metabolismo, y contiene
anti-histamina y propiedades anti-inflamatorias. Puedes hacerlo simplemente
vapor o añadirlo a una sopa.
Rábanos
Los
rábanos contienen dosis extremadamente altas de vitamina C y pueden ayudar en
la lucha contra los resfriados y otras infecciones. Si padeces de sinusitis o
dolor de garganta, es útil saber que su vapor ayuda a disolver el moco y la
flema.
Como
otros vegetales de raíz, es rico en potasio, que ayuda a limpiar los riñones,
la vesícula y los cálculos renales. Además también se cree que modulan la
tiroides. Son muy bajos en calorías, una buena fuente de azufre, y contienen
sílice, que mantiene la piel, cabello y uñas saludables.
Cómelos
crudos, y lo más jóvenes posible. Puedes añadirlos a una ensalada de lúcuma la
con fresas y semillas de sésamo tostadas.
Guisantes
de azúcar
Son
bajos en grasa y altos en fibra. Tienen un alto contenido de azúcar que se
transforma rápidamente en almidón, por lo que es mejor comerlos tan pronto como
sea posible para mantener su dulzura. Crudos como aperitivo o con hummus o en
ensalada.
Espárragos
Se
conoce como "la comida de los reyes", porque su perfil nutricional es
impresionante, ¡y tiene poderosas propiedades curativas! Son bajos en grasa,
altos en fibra y una buena fuente de hierro, vitaminas del grupo B
(especialmente ácido fólico), vitamina C y vitamina K. El agua que contienen y
el contenido de fibra no digerible también indican que tienen propiedades
diuréticas y laxantes. Es también un potente anticancerígeno y aminoácido que neutraliza
el exceso de amoníaco en el cuerpo.
Alcachofas
Aunque
la preparación de Alcachofas requiere un poco de esfuerzo, vale la pena. Son
muy saludables para el hígado, y un básico en las dietas de los aquellos a los
que les gusta beber alcohol. También mejoran la digestión y ayudan con la
digestión de las grasas. Son altas en fibra, bajas en calorías y una buena
fuente de vitaminas y minerales. Hazlas al vapor con aceite de oliva, limón,
ajo y un toque de sal.
Hinojo
El
hinojo tiene un aroma de regaliz único, que hace que sea un aliño refrescante
para cualquier menú de primavera. Contiene flavonoides, antioxidantes con
propiedades anti-inflamatorias; también ayuda a aliviar las flatulencias, los
calambres y la indigestión.
Aguacate
Aunque
no es estrictamente una comida de primavera, sin duda es el complemento
perfecto para cualquier ensalada primavera. Los aguacates, con su sabor a nuez,
tienen un alto valor energético
y
un pH perfectamente equilibrado. Son muy fáciles de digerir por la mayoría de
la gente y una fuente de glutamina que ayuda a sanar el revestimiento del
intestino. Su aceite rico en antioxidantes es fantástico para el cabello y la
piel, así como una ayuda para la pérdida de peso.
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