La Nota Curiosa:El origen de las notas músicales
Guido
de Arezzo (995-1050) es considerado el “padre de la música occidental”. Este
monje benedictino fue un teórico musical. Perfeccionó la escritura musical (en
su tratado Micrologus 1025 d.C.) implantando el tetragrama (cuatro líneas de
diferentes colores: Do=amarilla, Fa=roja, La intermedio=negra, Mi=negra) y
dando un sonido diferente a cada nota según su altura en el tetragrama. Esto
supuso el fin de la notación neumática propia del gregoriano.
La
historia, básicamente, es que Guido se dio cuenta de que los monjes no
conseguían recordar muchas veces los cantos gregorianos. La notación neumática
del gregoriano está basado en cuatro modulaciones de la voz o neumas.
La
particularidad de estas partituras es que no se anotaba ni el tempo, ni el
ritmo. Así que era imposible repetirlas si antes no las habías oido.
Punctum:
significa movimientos descendentes; una nota más grave.
Virga:
movimiento ascendente; una nota más alta o mantenerse en el agudo.
Podatus
o pes: movimiento grave-agudo (combinación de punctum y virga).
Clivis
o flexa: movimiento alto-bajo.
Guido,
estableció una serie de seis notas (hexachordum naturale) con distancias fijas
entre ellas: 2 tonos enteros inferiores, 1 semitono central, 2 tonos enteros
superiores.
Además
de implantar el tetragrama (precursor del pentagrama) y crear un sistema de
notación (notas), dio nombre a las notas musicales, e inventó un sistema de
anotación nemotécnica llamado la mano guidoniana.